ABRIGO
DE MURIECHO
El abrigo de
Muriecho atesora uno de los secretos más ocultos dentro del conjunto
de Arte Rupestre del Parque Cultural del Río Vero, en el municipio
de Colungo.
Fue
descubierto por el equipo del Museo de Huesca, dirigido por Vicente
Baldellou, a mediados de la década de los años 80, en una de sus
numerosas prospecciones efectuadas en la cuenca del Vero.
Está
situado en la margen derecha del barranco de El
Fornocal, muy conocido por los amantes del
barranquismo, en frente de El Portal d’a
Cunarda, impresionante arco natural de
grandes dimensiones.
La ardua
tarea de documentación llevada a cabo por el equipo del museo,
debido al precario estado de conservación de algunas figuras, pone
de manifiesto que estamos ante una pintura compleja y excepcional
dentro del conjunto pictórico del Río Vero y de gran relevancia
dentro del Arte Levantino (8.000/6.000-4.000/3.000 a-C).
Se trata de
un panel pintado en rojo en el que se representan más de treinta
figuras humanas. Destaca en la parte inferior y en el centro de la
composición, una posible escena que representa la captura de un
ciervo vivo en la que cuatro individuos agarran al animal por las
patas y los cuernos, junto a otra figura provista de un arco y de un
lazo. La figura que está enfrentada al cérvido parece que lleva una
especie de tocado. Alrededor de esta escena, el
resto de los personajes, en variadas posturas y actitudes, parecen
asistir al apresamiento. Los personajes que se encuentran en el
extremo izquierdo están mirando a la derecha, mientras que los del
extremo derecho miran hacia la izquierda como cerrando la
composición. Los del centro mantienen indistintamente las dos
direcciones y al menos dos de ellos llevan algo a la altura del
rostro, ¿posibles instrumentos musicales? A la izquierda se
representan cinco figuras humanas, un signo y una cierva. En el
mismo abrigo también aparecen representados sarrios
o rebecos.
El
ciervo es el animal más representado en el Arte Levantino del Río
Vero como así, también, lo atestiguan los abrigos de Arpán y
Chimiachas. La cantidad y dinamismo en las figuras junto a la
disposición espacial que se observa en el abrigo de Muriecho nos
lleva a pensar que estamos ante una escena excepcional dentro del
Arte Levantino.
#EsteVirusLoParamosUnidos
#YoMeQuedoEnCasa